Las nuevas piscinas romanas de Amador de los Ríos se podrán visitar después de Semana Santa

  • Este nuevo espacio arqueológico, ubicado en la calle Navarro Ledesma, en el entorno de la plaza Amador de los Ríos, forma parte del complejo termal público romano “más importante” de cuantos se han hallado hasta la fecha en España

La alcaldesa y presidenta del Consorcio de la Ciudad de Toledo, Milagros Tolón, ha visitado un nuevo espacio arqueológico en el entorno de la plaza de Amador de los Ríos que se corresponde con parte del complejo termal público romano “más importante” de cuantos se han hallado en España hasta la fecha.

El resultado de esta intervención, como han avanzado en la visita, se podrá visitar a través de las rutas Patrimonio Desconocido que gestiona el Consorcio después de Semana Santa. Durante la visita, y acompañada por el gerente de la entidad patrimonial, Jesús Corroto, la alcaldesa ha anunciado presupuesto para continuar con las excavaciones en este enclave, en concreto para realizar una serie de catas arqueológicas en la misma plaza de Amador de los Ríos.

Como ha recordado Milagros Tolón, la investigación y los proyectos arqueológicos sobe el Toledo romano se remontan al año 2004. “Enhorabuena al Consorcio porque esto no es trabajo de un día, de forma gradual y desde 2004 se ha venido investigando y poniendo luz al patrimonio y pasado de la ciudad”, ha indicado la alcaldesa para recalcar que “estamos ante el sistema hidráulico público de época romana más importante de España, un complejo que forma parte del patrimonio y de la historia del Toledo romano”.

En este sentido, la también presidenta del Consorcio ha apuntado que la investigación y las excavaciones “van a continuar, contamos con presupuesto para hacer catas en la plaza Amador de los Ríos, un hecho que será un evento arqueológico muy importante” si se confirma con bajo el suelo de este espacio existen lo que serán las instalaciones de servicio del complejo termal romano que perdura en el subsuelo de varios inmuebles de la zona, como éste de la calle Navarro Ledesma.

Piscinas frías del siglo II d. C.

La visita de este lunes se ha centrado en los últimos hallazgos. Se trata de piscinas frías del siglo II d. C. con elementos decorativos importantes. “Agradezco una vez más al Consorcio la labor que desempeña en nuestro Casco Histórico, miramos al futuro con la rehabilitación de viviendas para residentes y miramos al pasado con estas intervenciones arqueológicas y de recuperación del patrimonio”, ha dicho la primera edil.

Por su parte, el gerente de la entidad ha afirmado que continuar con los estudios sobre el Toledo romano iniciados en 2004 “es toda una alegría, la investigación no cesa”, además de explicar que la ciudadanía tendrá oportunidad de visitar los nuevos hallazgos de la calle Navarro Ledesma tras Semana Santa conforme a un calendario de visitas gratuitas que se dará a conocer en las próximas semanas.

De otro lado, el arqueólogo responsable del proyecto, Carmelo Fernández, ha señalado que con esta nueva intervención “podemos hablar de los restos termales más importantes de la Hispania romana, muy bien conservados y de una gran monumentalidad”.

Compatible con el uso residencial

Asimismo, el arqueólogo ha destacado el método de trabajo que el Consorcio de la Ciudad de Toledo aplica en este tipo de proyectos, donde se llega a acuerdos con los propietarios de los inmuebles para las excavaciones a la par que se interviene en los edificios, por ejemplo, en fachadas y en viviendas. “Es un proceso muy laborioso, una labor de rehabilitación de los inmuebles que se compagina con los trabajos arqueológicos gracias a un gran equipo multidisciplinar”, ha apuntado.

En cuanto al trabajo técnico, el arquitecto José Antonio Losada ha compartido con los medios la dificultad de compaginar este tipo de intervenciones con el día a día de la propiedad del edificio, además de la complejidad arquitectónica del proyecto. “El suelo de este inmueble se ha rebajado 3 metros respecto a la cota de suelo actual, eso requiere labores de sujeción en su cimentación y una integración de los restos arqueológicos con la arquitectura del edificio, hablamos de hacer compatible una excavación arqueológica con un edificio en pie”, ha dicho.