La traza del foro
Jose María Gutiérrez Arias
Pocos espacios han sido tan importantes para la historia del urbanismo como el Foro Romano, no sólo desde el punto de vista urbano arquitectónico sino también desde un enfoque social y cultural. Espacio precursor de nuestras plazas actuales, aún hoy en día se utiliza la palabra foro como un sitio comunal donde se reúne la gente y discuten asuntos de interés. Eran los foros en las ciudades romanas un símbolo de la “romanización”, el establecimiento de lo que llamaríamos “la marca de Roma”: implantar un modelo de tejido urbano y una nueva manera de construir, formas y maneras nuevas para impactar y romanizar a las gentes.
La magnitud e importancia de los vestigios romanos existentes en nuestra ciudad nos muestran que la Toletvm romana era una ciudad plenamente adscrita a la marca de Roma, a la vista de ello es lógico hacerse la pregunta: ¿dónde podría estar ubicado su foro?
Hace unas semanas tuve la oportunidad de visitar un inmueble de la Calle Santa Justa. En su interior, al fondo del mismo y localizado en planta baja, existe un paredón armado con potentes sillares de caliza y granito. Esta muralla pétrea se dispone vista en dos pequeñas habitaciones gemelas. Su aparejo, o forma de colocar los sillares, la manera de recibir unos con otros nos indica que es muro muy modificado, trabajado, reparado. Su traza original y sus materiales son romanos. Su alzado y aspecto actual corresponden a épocas más tardías, tardorromana, visigoda e incluso islámica.
Este muro, y otros que comentaremos a continuación, constituyen parte del cerramiento de contención de la explanada sobre la que, previsiblemente, se asentaría el foro de la Toletvum romana. Esta explanada, creada de forma artificial sobre la cota 530 m., se despliega en una de las partes más altas de la ciudad y en el centro neurálgico de la antigua urbe. Tiene como eje central la Calle de la Plata, como límite norte las medianeras traseras de los edificios pares de la Calle Alfileritos, y como límite sur las traseras de los edificios impares del Callejón de los Bécquer. Los laterales este y oeste se despliegan en suave pendiente, a ambos lados, como puntos de entrada y salida. En el interior de esta meseta artificial existen grandes estructura murarias de cronología romana, alguna de varias decenas de metros, que contribuyen a fijar la idea de que este emplazamiento era un punto principal de la ciudad romana.
1. Paramentos romanos del antiguo Hotel Lino, Calle Santa Justa nº 9
Hemos empezado la enumeración de estos puntos singulares por los vestigios existentes en el edificio de la Calle Santa Justa nº 9. En el local situado en la planta baja de este edificio, donde antiguamente estaba ubicado el Hotel Lino, se conservan varios muros datados como de época romana. En la esquina suroeste de la parcel se descubrieron, durante las obras de demolición del Hotel Lino, un muro medianero de grandes sillares dispuestos a soga y tizón. En los estudios arqueológicos, realizados durante las obras por nuestra compañera Soledad Sánchez-Chiquito de la Rosa, se indicaba lo siguiente: “Atendiendo a su tipología constructiva, estamos ante una construcción que aprovecha una base existente, posiblemente de época romana, sobre la que se levanta en época islámica el lienzo descrito, sirviendo a su vez como referencia a las construcciones de épocas posteriores“. Este muro corresponde en su alineación y traza con el de la Calle Santa Justa.
2. Calle Santa Justa nº 3
Ya comentado anteriormente, su aspecto es imponente. En el edificio en el que se encuentra se van a realizar obras en un futuro no muy lejano, circunstancia que permitirá descubrir su alzado completo. Previsiblemente gira noventa grados en dirección oeste, enlazando con otros tramos de muro visibles en la medianera trasera de los edificios impares del Callejón de los Bécquer.
3. Callejón de los Bécquer nº 7, nº 9 y 11
El actual nº 9 y 11 del Callejón de los Bécquer es un solar de discretas proporciones que, pese a su apariencia irrelevante, oculta varias estructuras muy importantes. Sorprende en él la altura de las medianeras, circunstancia que nos permite ver la gran diferencia de alturas entre la Calle de la Plata – Callejón de Usillos (donde se ubicaría la planta base del Foro) y el Callejón de los Bécquer. La mayoría de las medianerías traseras de este solar están revocadas en todo su alzado, tan sólo en su rincón izquierdo inferior se pueden apreciar de nuevo los grandes sillares. Es importante destacar la existencia de dos aljibes, que por su disposición constructiva consideramos romanos. El principal se encuentra a los pies de donde suponemos que gira el paredón de la calle Santa Justa nº 3. Este aljibe muy profundo, ahora casi cegado por todo tipo de objetos, tiene una embocadura cuadrada, excavada en roca y revestida de grandes sillares de granito. El otro aljibe no tiene vistos sus paramentos pero su planta cuadrada nos hace sospechar un origen romano.
En el edificio del antiguo Hogar Obrero, Callejón de los Bécquer nº 7, podemos ver, en su medianera posterior, algunos sillares aislados embutidos en muro muy heterogéneo de difícil datación. Este muro visto desde su otra cara, en el sótano del nº 2 del Callejón de los Usillos, también dispone, generosos, varios sillares de grandes dimensiones.
4. Adarve del Callejón de los Becquer nº 5
En este callejón, que serpentea en forma de L, existe en su codo un antiquísimo paramento, aparejado con ciclópeos sillares de caliza y granito, muy castigados por el paso del tiempo, formando un paredón monumental diseñado sin género de duda para quedar visto hacia una calle. Éste pétreo cerramiento, estudiado hace unos años por el arqueólogo Arturo Ruiz Taboada, marca la traza de una posible calle de época romana.
Predominan en su composición grandes sillares de piedra caliza, algunos de ellos con una marca de imposta o moldura. En las faltas o huecos del muro original se entremezclan mampuestos de granito, más o menos redondeados, pequeños paños de ladrillo y rejuntados generosos de morteros de cal de diversas épocas y momentos. En algunas zonas se insinúan huecos de paso, o quizás ventanas, … no es fácil decirlo.
Dos grandes machones formados por sillares calizos, situados en los extremos, marcan la traza general del muro. Su parte baja está muy deteriorada, y casi perdida en su totalidad, seguramente motivado por la acción de la humedad de las tierras acumuladas tras el. Al pie del vetusto murallón descansan caídos algunos sillares, agotados por el esfuerzo de siglos esperan a que alguien los ponga de nuevo en juego.
A su izquierda nos adentramos en una gran bóveda medieval en cuyo interior podemos ver, intercalados en sus muros de apoyo, grandes arcos de descarga, a modo de hornacinas, en cuyo interior vemos de nuevo sillares, esta vez de granito.
5. Calle alfileritos nº 8
Volamos ahora hasta el flanco norte de esta gran terraza artificial. Aquí vuelve a pasar lo mismo que en el Callejón de los Bécquer, todas las traseras de los edificios pares de la Calle Alfileritos presentan una gran altura y constituyen un gran muro de contención para sostener el nivel aterrazado del Callejón de Menores. Todos estos edificios, y sus elementos romanos, están comentados en una entrada que ya realizamos hace tiempo: Forma Urbis
6. Callejón de Menores nº 16
7. Calle Alfileritos nº 12
De este edificio no tenemos fotografías. El muro, ejecutado con “opus caementicium” u hormigón romano, está asociado a un magnífico paredón del siglo XIII al que se adosa un frogón del que sólo se pudo vislumbrar, tras el muro de cerramiento de la medianera del edificio, una pequeña parte visible temporalmente durante los trabajos de rehabilitación de una vivienda de planta 1ª.
8 y 9. Callejón de Menores nº 12
En el sótano del Callejón de Menores nº 12 podemos apreciar el espesor del muro de contención, en este caso también ejecutado con “opus caementicium”, en un hueco existente practicado a modo de tronera. La traza del muro parece escalonada quizás como consecuencia de ir perdiendo espesor a medida que gana en altura. El ancho del mismo es superior a los 2,5 m.
10. Callejón de Menores nº 11
En este edificio volvemos a encontrar muros conformados con sillares en el sótano y en la caja de la escalera de la vivienda. Estos muros, a diferencia de los comentados anteriormente, no constituyen parte de las estructuras de contención de la explanada del foro, su uso parece más bien asociado a edificios monumentales ubicados en su interior.
11. Cuesta de Agustín Moreto nº 6
12. Cuesta de Agustín Moreto nº 8
Este edificio es muy interesante ya que desde su planta de acceso se accede directamente al nivel de sótano. Esta zona tiene espacios abovedados sencillos, muy antiguos. En uno de ellos ha quedado al descubierto su pared de fondo, al haberse caído los revestimientos que lo cubrían, dejando al descubierto un paredón de hormigón romano.
13. Calle de la Plata nº 17
Entre la Calle de la Plata nº 17 y Calle de la Plata nº 9 y 11, encontramos un gran muro, con una longitud contrastada topográficamente de casi 40 m., ejecutado con materiales diversos, opus, sillares de caliza y granito. Su base de apoyo está cajeada en la roca madre y se encuentra casi arrasado hasta los cimientos. En este primer edificio apareció, durante los trabajos de limpieza de la cimentación mencionada, un pequeño fragmento de escultura romana.
14. Calle de la Plata nº 9 y 11
En el sótano del edificio de la Calle de la Plata nº 11 volvemos a ver la continuación del muro comentado en el apartado anterior. Al igual que en Calle de la Plata nº 17 esta estructura muraria está arrasada casi hasta los cimientos, no obstante todavía es visible su traza y una zona con varias hiladas de grandes sillares de granito.
A modo de remate final, incluimos una foto de la escultura del togado romano descubierto en las excavaciones que se realizaron en el año 2003 por el arqueólogo Julián García Sánchez de Pedro, en el patio del edificio de la Calle de la Plata nº 9, hallazgo asociado al conjunto de estructuras monumentales de la zona.
Este conjunto de fotografías se han ido obteniendo a lo largo de varios años. El origen es diverso: visitas técnicas, aportaciones de equipos de arqueología que han trabajado en los edificios de esta zona de la ciudad, … todas ellas han requerido la aportación generosa de los propietarios de los edificios visitados. En virtud de ello me gustaría agradecer de forma especial las facilidades prestadas por D. Ventura del Álamo, D. Jesús Pastor, D. Jesús Muñoz y D. Ángel Martínez Cánovas. Igualmente a los arqueólogos D. Rafael Caballero, Dña. Elena Sánchez Pelaez, D. Julián García Sánchez de Pedro y D. Arturo Ruiz Taboada por sus indicaciones y asesoramiento. Y por último a mi compañera Soledad Sánchez-Chiquito en relación a los estudios arqueológicos realizados en el antiguo Hotel Lino.
Esperamos ir haciendo nuevas aportaciones que contribuyan a un mejor conocimiento de la Toletvm romana.
.
Buenas tardes José María:
Un magnífico reportaje para conocer la Toletvm romana.
Gracias a todo el equipo.
Un saludo.
Muchas gracias José María por compartir los vestigios romanos que esconde Toledo.
Precioso artículo una vez más.
La pasión y el amor que demuestras por tu trabajo y por nuestro Toledo eres capaz de compartirlo de manera que miramos y percibimos a nuestra ciudad desde una consciencia diferente , siendo capaz de llevarnos a otras épocas.
Gracias a todos por los comentarios. Un placer escribir sobre la ciudad y sus rincones.
Gran artículo, José María. Muchísimas gracias por compartir vuestro conocimiento del Toledo antiguo.
Muchas gracias. La verdad es que es un placer escribir sobre la ciudad. A veces da un poco de respeto, es difícil hablar sobre temas de los que uno no es experto. Por eso intentamos ser cronistas, contar lo que vemos, ya vendrán otros a completar lo que nosotros no sabemos.
Un saludo